domingo, 6 de mayo de 2012

Ómar Pérez le dedica un gol a Léider


Ómar Sebastian Pérez, el nuevo ídolo cardenal, le dedica su gol a la principal figura santafereña de la última década: Léider Calimenio Preciado. (Del partido Santa Fe 5 - 0 Cartagena).

sábado, 5 de mayo de 2012

Se despide de las canchas

Por Carlos Rodriguez "El Diablo"

Léider Calimenio Preciado
“Tun-tun” goleador potente,
Se despide de las canchas
Dejando huella evidente.

Tumaqueño como El Tente
El Duende, El Diablo, El Ribiel,
Salió para demostrar
De que el gol era lo de él.
Con el más grande nivel
Hasta Bogotá llegó,
Su gran olfato quedó
Ampliamente demostrado.
El cuco de los arqueros:
Léider Calimenio Preciado.

Muchas veces criticado
Dizque por su sobrepeso,
Pero metiéndoles goles
Ahí los dejaba tiesos.
Precisamente por eso
Lo llamó la selección,
Y en el mundial al pasón
De Francia fue contundente.
Ante Túnez fue y bailó:
“Tun-tun” goleador potente.

Goleando dijo: ¡presente!
Siempre mostrando con qué,
En Caldas, America, Quindio,
Bucaramanga, Cali y Santa Fe.
En Racing de Santander
Y en el Toledo de España,
En Quito donde se baña
De titulo y de cumbancha.
Su gol que estuvo en Arabia
Se despide de las canchas.

Hoy Bogotá en avalancha
En el estadio El Campín,
De una manera emotiva
Lo despide en gran festín.
“Tun-tún” dos veces botín
Del torneo colombiano,
Más de cien goles no en vano
Confirman rotundamente:
Se va como goleador
Dejando huella evidente.


Tomado de eldecimarron.blogspot.com

Preciado y Julio recibieron el adiós de la hinchada de Santa Fe

'Los amigos de Léider' vencieron 3-2 a los del arquero, que anotó dos goles.


Los dos últimos ídolos de Santa Fe en la década anterior volvieron a sentir el amor de una afición que los ama, los respeta y los admira. Quizás por ello hasta las nubes aportaron lo suyo, se portaron bien en esta época de invierno y presenciaron un juego que resultó divertido y que entretuvo a la hinchada bogotana.

Más allá de los cinco goles convertidos en dos tiempos de 30 minutos, Léider Preciado y Agustín Julio volvieron a sentir ese afecto de los aficionados. Como cuando Preciado, al minuto 18 de la segunda etapa, marcó su gol y corrió 70 metros para ir a bailar, con su paso 'Tun-tun', al frente del grueso de la hinchada santafereña que festejó como en las mejores épocas de Calimenio.

Lo mismo sucedió con Agustín Julio, quien no solo marcó un gol sino que marcó dos. Uno en balón en movimiento y otro de penalti. Así, en la despedida, el exarquero cartagenero de 38 años se sacó el gusto de hacer un gol, algo que no obtuvo en toda su carrera.

Agustín Julio y Léider Preciado volvieron a ser protagonistas como cuando luchaban en la cancha con la camiseta roja. Los dos, como cuando comenzaron por el camino del fútbol en 'El Cóndor' volvieron a juntarse. En esta ocasión para despedirse, para darse el gusto de volver a jugar en el estadio que los consagró y ante el público que muchas veces los ovacionó. Léider y Julio, ídolos para siempre de Santa Fe.

Ficha técnica:

Amigos de Agustín Julio: Agustín Julio; Eduardo Orozco, Alexander Mendoza, Iván López y Juan Carlos España; Robert Villamizar, Leyton Guzmán, Roberto Vidales, David 'Cachaza' Hernández; Adolfo Valencia y Francisco Whittingham. DT: Heriberto Niño.

Suplentes: Wilson Cano, Wilson Gutiérrez, Víctor Rozo, Fabián Carabalí, Edgar Cortés, Paolo Rodríguez, César Pastrana y Roberto Marín.

Amigos de Léider Preciado: Armando Navarrete; Orlando Garcés, Adelmo Vallecilla, Luis 'Moro' Murillo, Gustavo del Toro, Harold Lozano, Eduardo Méndez, Carlos Rendón; Arturo Arizala, Jorge Díaz y Léider Preciado. DT: Eduardo Cañón.

Suplentes: Mauricio Rodríguez, Gustavo Díaz, Diego Córdoba, Eduardo Colmenares, Tommy Mosquera, Juan Carlos Quintero y 'Cheo' Romero.

Goles: Rendón, 'Babilla' Díaz y Léider Preciado para el equipo 'Amigos de Léider Preciado'; Agustín Julio marcó los dos goles para su equipo.

Leonardo Duque
Futbolred

viernes, 4 de mayo de 2012

Léider Preciado y Agustín Julio se despedirán del fútbol este sábado

En un acto simbólico, el argentino Martín Aguirre, que usa la camiseta 23 de Santa Fe, se la entregará a Léider y el número será retirado como homenaje al goleador.

Por Juan Diego Ramírez
El Espectador


Léider Preciado, el tumaqueño, debía echarse agua. Y Agustín Julio, el cartagenero, un aceite de almendras barato. Hace 22 años, cuando llegaron por primera vez a Bogotá, el frío les resecaba la piel. El primero permanecía sin buzo y el segundo andaba con unas chancletas (“de esas de costeño corroncho”, dice Julio) que arrastraba por el barrio Villa Granada.

En ese barrio eran vecinos (los separaban dos casas). “Comíamos juntos. Algunas veces en mi hogar porque yo le decía que la nevera de él parecía una pileta: pura agua y luz. Nunca tenía nada. Nos tocó pasar momentos duros y por eso valoramos lo que hemos hecho”, explica Julio, de 37 años.

Los dos tienen una historia similar en el deporte: se formaron en el Cóndor de la Primera B, cuando antes pertenecía a Santa Fe, y ambos se iban en buseta hasta el barrio Florida a los entrenamientos. A veces a pie.

En el club albirrojo debutaron como profesionales y allí dejaron su huella: Léider se convirtió en el segundo goleador histórico del club y Julio se volvió un baluarte del arco en los últimos tiempos. Además, los dos integraron la selección de Colombia en diferentes etapas. “Cuando Léider volvió del Mundial de Francia (1998), donde había anotado el gol contra Túnez, nosotros lo recibimos en su casa con el salsero Tito Rojas. Él sólo lloraba. Bueno, siempre lo hace”, recuerda Julio.

Además, en diciembre pasado decidieron retirarse del fútbol y el club les dio la opción de continuar vinculados. Léider como entrenador de divisiones menores y Julio como gerente deportivo. El sábado a las 4:00 p.m., en El Campín, ambos consumarán ese adiós en un partido de despedida que será preliminar del juego por la fecha 15 de la Liga entre Santa Fe y Cartagena.

Si comparten los mismos amigos en el fútbol, ¿cómo se van a conformar los equipos?

Agustín Julio: Ahí está el problema, tocará cara y sello. Muchos dijeron que querían jugar con los dos y es complicado. Creo que va a tocar cambiar al segundo tiempo.

Léider Preciado: En la cancha hacemos: escoge tú, escojo yo. No, mentiras, lo importante es que sea un compromiso entre amigos.

¿No creen que les quedaba un tiempo más como futbolistas?

A.J.: Es bueno retirarse por la puerta grande. Es mejor dejar el fútbol y no que el fútbol lo deje a uno. A pesar de que tenía ofertas para seguir tapando en otros clubes, pensé que podía ser importante en otra fase a nivel administrativo. Santa Fe es un ejemplo para los clubes que desechan a las personas.

L.P.: Sí, pero al menos yo ya estaba aburrido, del ambiente del fútbol sobre todo. Y acá nos están haciendo cumplir un sueño. El mío: dirigir niños. En Santa Fe empezamos, crecimos, terminamos, y nos vincula luego del retiro haciendo algo que nos gusta. Aparte estoy estudiando, aprendiendo mucho.

¿Cuál fue la clave del éxito en sus carreras?

A.J.: Uno debe disfrutar la profesión, pero ser responsable. Con la selección o con Santa Fe, me lo gozaba como si fuera el último partido. A los que empiezan les digo que se cuiden, que esta carrera es corta, y que el fútbol y Dios cobran todo en la vida. Así vas a durar mucho en el fútbol.

L.P.: Creer en lo que se tiene. En uno mismo. Eso es fundamental. Cuando yo vine a Bogotá, tenía la mentalidad de ser profesional, confiaba en mis capacidades y por eso me propuse ser disciplinado.

¿En qué se ven en unos años?

A.J.: Léider me decía que fuera DT, que él sería mi asistente; sería buena llave. Pero yo quiero ir más allá, proponerme grandes retos. Cuando el señor César Pastrana sea presidente de la Federación voy a empezar siendo presidente de Santa Fe (risas). A mí me gustaría estar en la Federación. Aunque quién sabe, tal vez un día, me nazca el gusto por ser técnico.

L.P.: Lo único que sé es que administrativamente a mí no me da (risas). Yo voy paso por paso y en las divisiones menores estoy aprendiendo. Ya debuté en un partido y ganamos. Ahora me dicen dizque Guardiola. Estoy aprendiendo y algún día quiero ser técnico de Santa Fe y ser campeón, porque eso fue lo único que me faltó como jugador.

¿A Agustín también le quedó faltando la séptima estrella del albirrojo?

A.J.: Claro. Aunque quedé tranquilo por haberlo dado todo, tengo aún la espinita en el corazón. Recuerdo que en 2010, cuando nos eliminó Tolima de las semifinales, lloré mucho. Nadie antes me había visto llorar en un camerino. Pero creo que ahora vamos por buen camino al título, y espero que gerencialmente pueda aportar mucho.

¿Cómo hace Agustín para sacarle las palabras a alguien tan introvertido como Léider?

A.J.: Ese sólo es tímido con ustedes. Conmigo no se calla. Aunque está claro que yo hablo más que él. La cosa es que hemos consolidado una bonita amistad, hemos vivido casi las mismas desavenencias, como la salida sorpresiva de Santa Fe en 2001. Pero también las cosas lindas.

Léider, ¿qué es lo que más le gusta de ser amigo de Agustín?

L.P.: Que no me deja hablar nada.

¿Una anécdota que recuerde el uno del otro?

L.P.: Que pisamos por primera vez un camerino en el Cóndor, en la Primera B.

A.J.: Que cuando se iba para España, en el 98, nos lloraba a todos, nos decía que no se quería ir. Parecía un niño chiquito. “Ay, no me quiero ir, ay”. Siempre ha sido muy sensible.

jueves, 3 de mayo de 2012

Santa Fe rinde homenaje a Léider Preciado y Agustín Julio en partido de despedida

El delantero Léider Preciado y el arquero Agustín Julio se despedirán el próximo sábado en El Campín ante los seguidores y exjugadores ‘cardenales’ quienes les rendirán tributo en un partido amistoso previo al encuentro entre Santa Fe y Real Cartagena por la Liga.

A partir de las 4:00 de la tarde, Preciado y Julio compartirán con sus amigos más cercanos el partido que despedirá a dos de los jugadores mas queridos por la hinchada ‘santafereña’. Entre los invitados estan el boliviano Juan Manuel Peña, Adolfo “Tren” Valencia, Freddy Rincón, Harold Lozano, David “Cachaza” Hernández y el técnico Wilson Gutiérrez.

“Para nadie es secreto mi amor por Santa Fe. Fue el equipo que me dio la oportunidad de jugar al fútbol y me llevó a actuar en el exterior”, expresó el goleador Preciado quien decidió retirarse del futbol en el 2011 a sus 35 años de edad.

Por su parte, Agustín Julio, quien se desempeña como gerente deportivo del equipo bogotano, señaló que aunque le han propuesto jugar para otros equipos decidió quedarse con Santa Fe desarrollando su conocimiento futbolístico.

Santa Fe es tercero en la Liga 2012-I con 23 puntos y se enfrentará al Real Cartagena en la fecha 15.

Fuente: Radio Santa Fe

miércoles, 2 de mayo de 2012

Los ídolos nunca se despiden

Por William Rincón
Mi Santa Fe


Aquel jueves 3 de septiembre de 2011, esos 4 mil fieles de siempre presenciaron un hecho histórico. No lo sabían. Ese frío jueves, Santa fe caía derrotado 1-2, en El Campín, ante Once Caldas. Si se quiere una premonición de lo que se venía un mes después, pero ese hecho resultó, al final, ser una simple anécdota.

Ese día fue histórico, digo, porque los fieles de siempre pudieron ver, por última vez, a Léider Preciado y a Agustín Julio jugar un partido profesional. Lo hacían con la camiseta de ese Santa fe que tanto les dio y al que tanto le dieron, por más de una década. Y pensar, que dos días antes El Campín estuvo atestado de gente para ver un partidito de Copa Internacional.

Con Santa fe nunca se sabe cuándo será una fecha imborrable. Como aquel 16 de septiembre de 2004. Ese miércoles Léider Preciado silenció las voces de los infames, con lo que mejor sabía hacer: goles. Ese día venció el dolor, por la pérdida de un hermano, y entró en los corazones de los fieles. Hay que tener valentía, y huevos, para pararse en una cancha de fútbol con dolor en alma y besar una camiseta.

Y es que, a veces, los ídolos en el fútbol se gestan lejos de una cancha. Agustín Julio, por allá en 2004 llegaba a los entrenamientos de Santa fe con una maleta Totto, fea como pocas, pero siempre con una sonrisa grande como sus manos de arquero. Su alegría lo destacó toda su carrera. Al rojo llegó después de pagar peaje en el torneo del Olaya. Heredó el arco de Rafel Dudamel. En febrero del 1997 se apropió de la portería. Ni él sabía que el 18 de noviembre de 2009 haría tocar el cielo a miles de santafereños.

Qué noche fue esa noche. Con esas benditas manos Agustín supo tapar ese penal a Germán Centurion. Esas benditas manos separaron a los hinchas de una tristeza única e indescriptible. Minutos después, como si fuera poco, esas benditas manos supieron detener otro penal, esta vez para darle un pasaje sin escalas a la tierra de la felicidad a los 40 mil afortunados que gritaron hasta las lágrimas aquel título. Si cree, que estas palabras son exageradas, usted no estuvo en El Campín esa noche mágica.

Noches inolvidables. Fechas inolvidables. Recuerdos inolvidables. Pero sobre todo personas inolvidables. En una época donde los jugadores de fútbol son cada vez más efímeros, donde saben más de redes sociales que del juego. Donde alcanzar algo de dinero es más importante que alcanzar la gloria, personas como Léider Calimenio Preciado Guerrero y Agustín Julio Castro dejan el fútbol dejando un tesoro tan valioso como el oro: el aprecio eterno de una hinchada, que nunca los olvidará.

El sábado 5 de mayo de 2012, los hinchas y la institución le darán un homenaje a estos dos emblemas. No los despedirá. Porque, amigo, un ídolo nunca se despide. Nunca se retira. ¿O acaso, hincha de Santa fe, usted no le contará a sus nietos (si es que tiene) que el 16 de septiembre de 2004, Léider Preciado acalló a la infamia y besó un escudo? ¿No le contará, que el 19 de noviembre de 2009, Agustín Julio le permitió, por fin, conocer el significado de las palabras lágrimas de alegría?

Léider, Agustín, y perdón por llamarlos por sus nombres (y por escribir en primera persona), agradecerles por todas las alegrías es poco. Resta decirles que algún día, en una fecha muy lejana a esta, un niño con la camiseta de Santa fe hablará de ustedes, de sus hazañas y sonreirá. Porque los ídolos nunca se retiran. Porque, señores, los ídolos son eternos.